Desde octubre 2010, agentes de inteligencia informaron que los senderistas se paseaban por el área en sociedad con los narcotraficantes. No obstante, enviaron a patrulla a la que terroristas causaron siete bajas.
La inteligencia militar alertó que en la zona de Choquetira, en el distrito de Vilcabamba, en la provincia cusqueña de La Convención, se había detectado el desplazamiento de una columna terrorista, por lo que recomendaba adoptar las previsiones necesarias.
Sin embargo, el 4 de junio, 13 efectivos fueron emboscados por los senderistas en el ámbito de Choquetira. Por la explosión de minas y disparos de los subversivos, tres suboficiales perdieron la vida. Otros dos murieron en las horas siguientes al ataque. No recibieron atención de emergencia oportuna porque las condiciones geográficas impidieron el aterrizaje de helicópteros para la evacuación inmediata.
El entonces ministro de Defensa, Jaime Thorne, afirmó que no tenía conocimiento de la existencia de informes de inteligencia sobre eventuales ataques en la zona porque era “poca transitada por miembros de las Fuerza Armadas”.
Guerra avisada
Fuentes militares consultadas y notas de inteligencia a las que tuvo acceso este diario establecen claramente que sí se elaboraron reportes sobre la actuación terrorista en el distrito de La Convención, y que éstos fueron de conocimiento, por lo menos en el ámbito de inteligencia del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, desde octubre del 2010.
Fuente: La República
De acuerdo con la Nota de Información N° 025 elaborada por el Puesto de Observación del Vrae (P.O.V.), en los días previos a los comicios regionales de octubre del año que pasó, fueron detectados senderistas que se desplazaban por el poblado de Choquetira.
El documento indica como antecedente que los senderistas interceptaron el 29 de setiembre del 2010 a Yulisa Pando Umeres, representante de la ONPE en la zona, para interrogarla sobre el despliegue de las fuerzas del orden y la ubicación exacta de las mesas de sufragio.
La nota señala que varios comuneros también reportaron que al menos 13 subversivos se desplazaban hacia la comunidad de Choquesafra. “Sendero contaba con la simpatía de algunos de los comuneros de la zona por la ausencia de las fuerzas armadas en la zona”, indica el reporte.
El informe agrega que en esa zona, si bien no es parte central de las operaciones policiales del Vrae, se ha convertido en ruta de salida de la droga. “La columna liderada por ‘Gabriel’ (cabecilla terrorista) brinda seguridad a Flavio Sánchez (traficante) y a la droga”, se precisa.
Notas elaboradas posteriormente informan en los mismos términos de una evidente presencia senderista en Vilcabamba. El 7 de junio, tres días después de producido el atentado contra la patrulla, un “alfa” (agente de inteligencia) reportó que había dado cuenta sobre la presencia de Sendero Luminoso en Choquetira en anteriores notas de información al Comando de Inteligencia y Operaciones Especiales Conjuntas.
¿Por qué el envío de solo 13 militares a una zona que inteligencia advertía era zona de presencia senderista? El analista ayacuchano en temas de seguridad Pedro Yaranga afirma que Vilcabamba está bajo el control de Sendero desde hace dos años.
Un alto oficial del Comando Especial del Vrae señaló, sin embargo, que no les llegó ninguna nota de inteligencia que advirtiera de senderistas en la zona.
“Teníamos que enviar personal a 621 lugares locales de votación. Si hubieran existido esos informes, habríamos enviado más personal. Hace dos años desactivamos una base de apoyo senderista. Ahora sabemos que Sendero ha retornado”, dijo el oficial.
Se perdieron en el camino
Las notas de inteligencia elaboradas desde octubre pasado llegaron a la División de Inteligencia del Comando Conjunto, a cargo del general EP Róger Zevallos Rodríguez, y al Comando de Inteligencia y Operaciones Especiales Conjuntas, al mando del general Leonel Cabrera Pino, actual jefe de la Región Militar del Centro.
“Fue un ataque sorpresivo. Pero no era el paso obligado y nunca hubo patrullaje por esa zona. No había manera de determinar por dónde iban a pasar”, alcanzó a decir el ministro Thorne en conferencia de prensa.
El presidente Humala advirtió que no aceptaría más emboscadas a los miembros de las Fuerzas Armadas “y que no exista ningún responsable”.
Este artículo, escrito por Miguel Gutiérrez R., fue publicado en el diario La República.
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